Omniprocessor: la máquina que convierte desechos en agua potable


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A través de su fundación, Bill y Melinda Gates le plantearon al ingeniero Peter Janicki un objetivo ambicioso: nada más y nada menos que «cambiar al mundo». Así comenzó el proyecto de construcción de OmniProcessor, una máquina que hoy es capaz de convertir excrementos en agua potable.

La primera planta funcionará dentro de unos meses en Dakar (Senegal)

La primera planta funcionará dentro de unos meses en Dakar (Senegal)

En función de la humedad del material tratado, OmniProcessor puede transformar en un día100 toneladas de desechos orgánicos en unos 80.000 litros de agua potable. El proceso es posible gracias a un complejo sistema de sucesivo refinado de los residuos: “En el primer paso lo hervimos a mil grados y descartamos el 99% del combustible. De ahí obtenemos un vapor relativamente limpio que refinamos con filtros muy, muy finos. Luego lo condensamos y lo sometemos otra vez a procesos de limpieza”, describe Janicki, CEO de Janicki Bioenergy, la empresa que se ocupa de la increíble mutación (que demora solo cinco minutos en conseguir agua a partir de los desperdicios).

La máquina

El OmniProcessor es grande (su creador propone imaginarla como dos colectivos estacionados uno al lado del otro). A su alrededor, requiere espacio para la carga de desperdicios. Aunque no devela el misterio de su costo, en función de su utilidad, Janicki estima que en tres años como máximo la máquina amortizaría su costo en cualquier ciudad en la que se instale.

Los desechos orgánicos cuentan con un 80% de agua. La máquina separa por destilación el agua de la biomasa, que se transforma en cenizas útiles como fertilizantes.

Los desechos orgánicos cuentan con un 80% de agua. La máquina separa por destilación el agua de la biomasa, que se transforma en cenizas útiles como fertilizantes.

Teniendo en cuenta que , según datos de la OMS las muertes por diarrea causadas tanto por el agua contaminada como por su escasez para la higiene llegan a más de dos millones por año, el impacto del Omniprocesor es incalculable, ya que la máquina no solo permitiría la producción de una gran cantidad de agua al día, sino que también supondría un beneficio económico: “La idea es que la máquina dé dinero a la institución que lo compre. La máquina generaría agua, electricidad y también un desecho muy útil: cenizas completamente libres de patógenos que pueden usarse como fertilizante”.

Los desechos orgánicos cuentan con un 80% de agua. La máquina separa por destilación el agua de la biomasa, que se transforma en cenizas útiles como fertilizantes. En el siguiente video, en el que el mismísimo Bill Gates toma un vaso de agua (que cinco minutos antes era desecho), se explica el «paso a paso» del proceso:

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