Hoy se se celebra el Día Mundial de la Naturaleza. Se trata de una fecha que buscar generar conciencia acerca de la necesidad de proteger y conservar la vida silvestre en todas sus formas.
Declarado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y bajo la disposición de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés), desde el 2013, cada 3 de marzo se considera el Día Mundial de la Naturaleza (World Wildlife Day) con dos objetivos complementarios: celebrar la diversidad de la flora y fauna salvajes por un lado y tomar y crear conciencia sobre los peligros en los que el ser humano ha puesto a las especies y la necesidad de su conservación.
Cada año, el 3 de marzo la Organización de las Naciones Unidas (ONU), convoca a los Estados miembro, los organismos internacionales, las ONG, la sociedad civil y a todos los individuos del mundo a observar y participar en las actividades que se realizan en cada ciudad, provincia o país, destacando el poder que tienen las comunidades locales para combatir el comercio ilegal de la vida silvestre en sus territorios.
«Tomar en serio los delitos contra la vida silvestre significa obtener el apoyo de todos los sectores de la sociedad que intervienen en la elaboración y el consumo de productos derivados de la fauna y flora silvestres, muy utilizados como medicinas, alimentos, material de construcción, mobiliario, cosméticos, prendas de vestir y accesorios.» Secretario General Ban Ki-moon, Mensaje del Día Mundial de la Naturaleza, 3 de marzo de 2015
El objetivo es crear conciencia y combatir los crecientes delitos contra la naturaleza en busca de beneficios económicos (como el tráfico ilegal de animales, la caza furtiva, o el tráfico de partes -como el marfil de los cuernos de elefante, muy común en África-) o simplemente la diversión de las personas (como la caza deportiva de animales silvestres), situaciones que elevaron la condición de peligro de extinción de numerosas especies.
Según se destaca en el site oficial , además de su valor intrínseco, la fauna y la flora salvajes contribuyen a los aspectos ecológicos, genéticos, sociales, económicos, científicos, educativos, culturales, recreativos y estéticos del desarrollo sostenible y del bienestar de los seres humanos.