Charly Karamanian se propuso construir su propia casa de manera sustentable con un diseño atractivo y eficiente a la vez. El lugar elegido fue el barrio cerrado Las Cañuelas Club de Campo, en Cañuelas, provincia de Buenos Aires.
El arquitecto Juan González Calderón diseñó un nuevo emprendimiento de vivienda verde e inteligente, en una superficie cubierta de 359 m2 y más 125 m2 de terrazas y galerías en la localidad de Cañuelas, provincia de Buenos Aires.
El proyecto se denomina Casa G; la letra elegida deriva de las iniciales de las palabras Green, Gaia y Galileo, las cuales representan el contacto con el medio ambiente, el vínculo con la tierra y el respeto por el planeta.
Construcción sustentable
La Casa G fue proyectada a partir del diseño bioclimático, concepto según el cual cada uno de los ambientes y técnicas se disponen aprovechando al máximo posible las características del clima y la naturaleza. De este modo, la orientación y desarrollo de los ambientes de las dos plantas que conforman la casa se plantearon aprovechando los beneficios de la luz solar y la ventilación cruzada.
Este diseño garantiza, además, una adecuada temperatura de la casa en las diferentes estaciones del año.
Todos los materiales empleados poseen certificación de producción bajo normas de sostenibilidad. Además, durante su construcción, se separaron y dispusieron los residuos generados durante la obra, a fin de reutilizarlos.
Por ejemplo, la madera empleada como cerco de la obra se trabajó para la construcción de bacanales de la huerta orgánica, composteras y lumbricomposteras. Otros materiales se enviaron a un centro de reciclado.
Prácticas amigables con el ambiente
Una casa sustentable debe acompañarse del fomento de buenas prácticas entre sus habitantes. Para ello, la Casa G cuenta con un sistema de separación y reciclado de residuos en sus distintas etapas. Además, el garage de la casa permitirá alojar y recargar automóviles eléctricos, y el observatorio astronómico de la planta superior permitirá entrar en contacto con el planeta de un modo diferente.
Todos los electrodomésticos y la línea blanca serán de bajo consumo energético e hídrico. Y el sistema smart metering permitirá medir el consumo de energía eléctrica y de agua en tiempo real.
El proyecto contó con el apoyo de más de 30 empresas de la industria de la construcción y afines que se destacan por la sustentabilidad, calidad y tecnología de sus productos y servicios. Incluso, algunas de ellas aprovecharán el proyecto para lanzar nuevos artículos y dispositivos sustentables en el país.